Llevar una vida simplificada tiene un significado y un valor diferente para cada uno de nosotros.
Pero en general, significa deshacerse de cualquier “equipaje extra”: mental, emocional, financiero, digital, físico…
Eliminar la innecesario para poder concentrarnos en las cosas que REALMENTE importan.
Pero llegar a lo simplificado no es siempre un proceso fácil.
No existe una guía paso a paso.
Cada motivación es única, las circunstancias. Mis prioridades no van a ser idénticas a las tuyas.
Aquí encontrarás algunas ideas que te pueden ayudar, no todas funcionarán para ti, así que elige las que apliquen a tu vida.
1. Simplifica tus rutinas y crea nuevas
Te levantas tarde para ir al trabajo, tomas una ducha rápido y no sabes qué ponerte. No alcanzas a desayunar, solo a tomar un café antes de salir corriendo. Lo mismo en el trabajo, siempre corriendo, apagando incendios. Te sientes abrumado y desconcertado. Mucho antes de que termine la semana estás agotado sin saber si podrás hacer todo lo que tienes que hacer.
¿Cómo salir de este ciclo miserable? Una palabra: rutinas.
Las rutinas de la mañana y la tarde nos preparan para el éxito. Nos ayudan a lograr más, pensar con claridad y hacer el trabajo que realmente importa.
Tener una rutina también reduce la cantidad de decisiones que debemos tomar a lo largo del día, lo que puede marcar una gran diferencia para simplificar nuestra vida.
2. Simplifica tus compromisos – Decir NO más a menudo
Todos tenemos dificultades para decir no.
Simplemente nos aterra la idea de herir los sentimientos de otra persona.
Pero si no decimos no,
- las prioridades de los demás tendrán prioridad sobre las nuestras,
- no tendremos el tiempo que necesitamos para descansar y recuperarnos,
- terminaremos frustrados y estresados y,
- no podremos decir sí a las cosas realmente importantes.
En el proceso, malgastamos nuestros recursos más valiosos: tiempo, energía bienestar y dinero, en cosas que no son importantes para nosotros.
Cada vez que decimos NO a algo que no es importante, decimos SÏ a algo que sí lo es: nuestro trabajo, nuestras relaciones, nuestra energía, nuestro bienestar.
3. Simplifica el consumo de medios
Los medios de comunicación, ya sea televisión, Internet, radio, juegos de computadora, redes sociales, pueden llegar a dominar nuestras vidas.
Existen pocas cosas que no podamos hacer sin deslizar, sacudir, hacer clic o realizar cualquier acción táctil.
Vale la pena preguntarnos ¿en qué emplearíamos nuestro tiempo si no lo utilizáramos en un dispositivo digital, viendo televisión o jugando?
Simplifica tus redes sociales. Considera dejar de seguir a aquellas personas y temas que realmente no te interesan y establece límites y horarios para consultarlas
Simplifica tu correo electrónico. La mayoría de nosotros pasamos más tiempo de lo necesario en nuestra bandeja de entrada, filtrando correos electrónicos de ventas y mercadeo. Considera cancelar la suscripción cuando un mensaje no te interese.
Nos encantan las promociones, pero definitivamente no necesitamos que nos envíen correos electrónicos 25 veces al día.
4. Simplifica tus posesiones
Tener demasiadas cosas complica nuestra vida.
No solo drenan nuestra billetera, también nuestra energía y atención.
¿Cuánto tiempo gastamos organizando y limpiando platos, juguetes, papeles, ropa…?
poseer menos es mejor que organizar más
No significa poseer lo menos posible, se trata de vivir solo con lo que realmente necesitamos.
5. Simplifica tu forma de pensar
Todos contamos con un río de pensamientos que pasan por nuestra cabeza y un diálogo interno propio.
Pero, ¿somos consciente del contenido que nuestra mente está creando?
Por ejemplo, tal vez quieras simplificar eliminando las cosas en tu espacio físico. Puedes elegir ordenar un cajón, un armario, tu oficina, la cocina o toda la casa.
Sí, tienes menos cosas, éste ya es un paso importante.
Pero, ¿QUIERES menos cosas?
Porque si te deshaces de un montón de cosas pero realmente no has adoptado la mentalidad de la simplificación, probablemente terminarás volviendo a comprar más y encontrarás que tu casa está nuevamente desordenada.
En conclusión
Con menos distracciones a tu alrededor, las pequeñas cosas de la vida tienen espacio para ser notadas.
Enamórate de la simplicidad, de lo básico, disfruta de lo que ya está allí en lugar de querer lo que no tienes.
Simplificar es un camino diferente para todos, que nos lleva al mismo lugar: a disfrutar lo que realmente es importante, del ahora, de nuestras pasiones.
Creo que es importante tener orden en nuestras vidas, cosas, el lugar en donde vivimos y la reducir la lista de la gente con las que convivimos, así y solo así estaremos más abiertos a conocer más gente que sume cosas positivas a nuestra vida. Y sentiremos esa paz que anhelamos.
¡Saludos, Israel! 🤗 apreciamos mucho tu comentario, para nosotros es gratificante que nuestros lectores apliquen lo aprendido en este blog. 💙