El término ciudadanía digital se ha vuelto bastante común y es parte de nuestra realidad.
Sin embargo, y a pesar de su importancia, todavía no se enseña ampliamente en nuestras escuelas.
Al igual que los estudiantes deben aprender a ser buenos ciudadanos dentro de una comunidad, también deben saber cómo comportarse y ser una parte positiva de una comunidad digital.
No importa qué grupo de edad o materia se enseñe, aprender cómo comportarse adecuadamente en línea y protegerse de los posibles peligros, son habilidades necesarias que se tienen que aprender, y estas lecciones deben ser parte del trabajo de cada profesor.
¿Qué es la ciudadanía digital?
La ciudadanía digital se refiere a la experiencia general de navegar en el mundo en línea.
La buena ciudadanía en Internet abarca todo, desde tomar precauciones de seguridad, hasta practicar la etiqueta social adecuada.
Los usuarios de medios digitales tenemos derecho a la privacidad y a la libertad de expresión, pero también tenemos la responsabilidad de actuar adecuadamente dentro del ámbito virtual.
¿Por qué es tan importante la ciudadanía digital?
Al igual que en el mundo físico, queremos que nuestros estudiantes estén a salvo, seguros, felices y sean amables y éticos en línea.
Como en muchas otras áreas de la vida, nuestros estudiantes necesitan la guía de adultos, incluyendo maestros y miembros de la familia, para resolver los problemas digitales o utilizar la tecnología de manera segura y efectiva.
Como educadores, no podemos ignorar este hecho y por encima de todo, debemos crear una cultura positiva donde los estudiantes se sientan capaces de usar la tecnología de manera segura y con propósito.
¿Qué temas debemos abordar al enseñar ciudadanía digital?
Aunque no se tenga un currículo específico para este tema, los profesores podemos comenzar por incorporar lecciones sobre seguridad en línea y buen comportamiento digital como parte de cualquier tema que se enseñe usando la tecnología.
Aquí incluimos algunos temas que deberían abordarse. Seguramente se nos escaparán algunos, pero es una manera de comenzar como profesor del siglo XXI.
1. Información privada: la información privada es información que puede usarse para identificar a una persona. ¿Reconocen tus estudiantes su importancia y saben cómo proteger detalles como dirección, correo electrónico y número de teléfono?
2. Información personal: si bien esta información (como la cantidad de hermanos y hermanas que tienes o tu comida favorita) no puede usarse para identificarte, debes elegir con quién la compartes.
3. Fotografías: nuestros alumnos necesitan saber qué fotos son seguras para publicar. Estar al tanto y conocer sobre geoetiquetado y el reconocimiento facial.
4. Su voz digital: Debemos entender cuál debe ser nuestra voz y cómo queremos que nos perciban en línea. ¿Sabemos que tenemos y dejamos siempre una «huella digital» que es casi imposible de borrar? ¿Somos intencionales acerca de lo que compartimos?
5. Contraseñas: ¿Sabemos cómo crear una contraseña segura? ¿Sabemos que tanto el correo electrónico como otras actividades en línea, como la banca, deberían tener un mayor nivel de seguridad y nunca se deben usar las mismas contraseñas para otros sitios?
4. Propiedad: ¿Tus estudiantes entienden acerca de los derechos de autor, “Creative Commons” o cómo generar una licencia para su propio trabajo? ¿Respetan los derechos de autor?
5. Protección: ¿Los estudiantes entienden qué son los virus, malware, phishing, ransomware y robo de identidad, cómo funcionan y cómo deben protegerse?
6. Salud y bienestar: las largas horas en la computadora pueden causar dolor de espalda y fatiga visual o ser un síntoma de una adicción a Internet. ¿Tus estudiantes entienden que deben aprender a equilibrar su tiempo en línea con su bienestar físico y psicológico?
7. Etiqueta: uno de los aspectos más importantes de la ciudadanía digital es la etiqueta en línea y la capacidad de interactuar adecuadamente con otros. ¿Saben tus estudiantes cómo evitar el ciberacoso, qué hacer cuando se experimentan o lo presencian?
8.Colaboración y cómo compartir su conocimiento: otra parte de la enseñanza de la ciudadanía digital se refiere al intercambio de conocimientos. ¿Creamos discusiones abiertas acerca de cómo aprendemos de otros en la era digital? ¿Qué hace que esto sea interesante, único e informativo? ¿Los animamos a ser creadores en vez de consumidores?
Conclusión
El maestro del siglo XXI se enfrenta a muchos retos, uno de ellos es la enseñanza de la ciudadanía digital, aquellas habilidades y conocimiento que necesitan para navegar por el mundo de hoy.
No sólo en necesario hablar de los cuidados y seguridad, sino de una etiqueta, de la huella que cada uno quiere dejar y cómo ayudar a hacer del mundo un lugar mejor.
Me gustó mucho el artículo de la «Ciudadanía Digital».
Estimado José, gracias por su comentario, estamos para servirle.